Pinta el otoño con acuarela

¡Quién me iba a decir a mí que iba a pintar tantísimo con acuarela!

Me iba a enamorar de esta técnica de esta manera, y que incluso  iba a impartir talleres y cursos online.

Te digo esto porque cuando comencé a pintar con ella no me gustó nada…¡No la podía controlar! Mi mente quería pintar una cosa, pero mi mano hacía otra completamente diferente, y en el papel la pintura iba a su libre albedrío…

Era tan frustrante que dejé de pintar porque me ponía super nerviosa, y pensaba que nunca la iba a dominar… Pero tiempo después, decidí darle otra oportunidad ¡Y esta vez sí que conseguí controlarla yo a ella! Y no al revés como había sucedido tiempo atrás.

Quizá te sientas identificada con mi historia

Y es que he conocido a muchas chicas que les ha ocurrido lo mismo, llegando a abandonar esta técnica tan bonita por haber tirado la toalla en el proceso de aprendizaje.

Saber de materiales y técnicas es imprescindible, pero hay algo muy importante que no se suele tener en cuenta, y es la constancia, la paciencia y la actitud positiva mientras estamos aprendiendo algo nuevo.

Pintar con acuarela parece un juego de niños.

Porque la teoría es muy fácil: mojas el pincel en agua, coges pintura y pintas sobre el papel. Hasta ahí bien. Pero cuando empiezas a pintar te das cuenta que en la práctica, la acuarela es una de las técnicas más difíciles que existen. ¿Por qué? Porque tiene unas características especiales que la hacen muy diferente a otras como el óleo, o técnicas secas como lápices de colores.

• Y es que la acuarela es una técnica muy fluida ya que su principal ingrediente es el agua, por lo que se hace más difícil controlar.
• Además, los errores no se pueden deshacer, por lo que aquí no hay ctrl + z que valga.
• Seca muy rápido, así que hay que pintar con cierta rapidez y destreza.
• Menos es más. Es decir, mientras menos pinceladas, más fresca, expresiva y bonita será. Pero para conseguirlo se necesita bastante práctica.
• Sus capas de color son transparentes y como el papel es blanco, hace que esta técnica sea muy luminosa. Por lo que debemos entender que el blanco del papel forma parte de la pintura.
• ¿Se utiliza por lo tanto el color blanco? ¿Sí o no? Yo sigo defendiendo que en acuarela es innecesaria su utilización, porque el blanco máximo es el del papel, y para aclarar un color sólo hay que añadir agua. Pero eso dependerá de tu gusto personal y el resultado que quieras conseguir.
• Se pinta de claro a oscuro.

Consejos que debes tener en cuenta para empezar a pintar con acuarela:

1. La práctica hace al maestro.

La única forma de aprender a pintar y conseguir habilidad para controlar la técnica, es practicar. Así que toca poner buena música y pasar buenos ratos entre pinceladas y colores. Una buena idea para mantener el hábito es participar en algún reto o simplemente proponerte pintar un rato al día o a la semana.

2. Utiliza buen material.

Solemos pensar que para empezar a pintar con acuarela, lo mejor es  comprar más barato para no desperdiciar el bueno y tirar el dinero. Pero ten en cuenta una cosa: utilizar material de mala calidad te va a complicar mucho la labor. Así que te aconsejo que comiences con material de calidad media, y ya irás probando otras marcas y calidades con el tiempo. Mi lema es: “Mejor pocos materiales y buenos, que muchos y malos”

3. Pinta sin miedo

Relájate. No pasa nada si las primeras pinturas son un desastre. Nos ha pasado a todos. No nos estamos jugando la vida, así que pierde todo ese miedo a equivocarte porque una vez rompas ese bloqueo mental, comenzarás a disfrutar de la acuarela. En cada práctica aprenderás cosas nuevas, así que sacarás un aprendizaje de cada error.

4. Prepara todo lo que necesites antes de pintar.

Es todo un ritual. Pones música y colocas sobre la mesa los pinceles, el papel, tu caja de acuarelas, tarros con agua… Pones todo a tu gusto en el lugar donde te resulte más cómodo, para que tengas todos los materiales que vayas a utilizar a mano. De esta forma, no tendrás interrupciones una vez te pongas a pintar y te llegue la inspiración.

Además, con el tiempo colocarás las cosas en el mismo lugar porque trabajarás de forma más ágil y rápida, por lo que será en beneficio de conseguir una acuarela con un resultado más fresco.

5. Experimenta. Con lo tiempos de secado, con los colores, las texturas… La acuarela es super creativa y puedes mezclarla con otro procedimientos pictóricos como témperas, tintas, acrílicos, lápices de colores…¡Imaginación al poder!

¿Te han servido estos consejos? Si tienes alguna duda, te leo en comentarios 😉